domingo, octubre 16, 2005

Lamento el atraso en la publicación semanal que me propuse a la hora de retomar el blog, generalmente posteaba algunos articulos entre miercoles y jueves, pero esta ultima semana estubo un poco colmada de eventos (no precisamente los hoyos de la calle) entre trabajos, clases, fiestas y falta de inspiración... pero, creo que aun estamos a tiempo y, como corresponde, con un tazón que me acompaña cada vez que actualizó la bitacora.
Bueno, aqui vamos otra vez.



Será apropiado descontextualizar esta ciudad?? (Parte 3/3)


24/7

A medida que pasan los años, me da la sensación de que cada vez estos pasan mas rapido. No tengo idea si será proporcional a la cantidad de cosas que tenemos que hacer con nuestro tiempo, pero, cuando era cabro y estaba en básica, me parecían eternos los años de colegio, mas aun teniendo en aquellos tiempos las clases en la tarde (como acostumbra ser en de 1º a 4º básico en mi colegio) lo cual lo hacía sentir mas tedioso aun...
Los años de enseñanza media simplemente pasaron en un abrir y cerrar de ojos, esos 4 años cargados de emociones y experiencias en distintos ambitos.

Al dar el salto de colegio a Universidad, las cosas comenzaron a cambiar de cierta manera particular. En mi caso, las levantadas eran esta vez mas temprano, ya que, para viajar de melipilla a Santiago y llegar a las 8:30 a la U, significaba el levantarse a eso de las 5:30 am para levantarte, pescar tu bolso y irse semi zombie a tomar el bus de las 6:30 con una tostada a medio comer en la boca y un yoghurt en la mano.

En ese tiempo tenía que partir solo, ya que, mi vecino (el paja. ser mencionado en el anterior post) en aquel tiempo estaba viviendo solo en un mini depto por ahi cerca de la piojera. lo cual implicaba el hacer la caminata (5 a 6 cuadras) para encontrarme con aquel bús de vidrios empañados por la respiración de mas de 40 personas que iban a sus puntos de estudio y trabajos en la capital. Bueno, si es que reconocía la micro también, ya que, aquellas madrugadas oscuras y que en muchas ocaciones acompañada de una estupenda neblina que a parte de ocultar todo a su paso, en conjunto con el frio de la helada mañanera te calaba hasta los huesos.

La cosa cambio al no estar mas en ingenieria (usach para los que no tenían idea), llegó el turbulento 2003, el año de los cambios, el cual dio como resultado el encontrar mi vocación en el diseño y mas tarde entrar el 2004 a mi actual universidad, lo que implico también, cortesia de primita Gabi y su actual esposo gato, el quedarme gran parte de la semana en Santiago.

Estamos a 2 meses de terminar este segundo año en Diseño, también a los mismos meses de terminar un primer, y muy agradable por lo demas, año de convivencia con Sonia, mi hermana, (por razones clasificadas por el estado y los registros 4,8,15,16,23,42) y al mirar hacía atrás, hago un recuento de las cosas que han pasado, las que he dejado ir, y aquellas ocaciones en que me han dado los locos al pensar en mi lugar aca en esta gran ciudad, al estar viviendo el día a día sin volver a mi hogar algunas veces hasta en un mes.

Como diría Armin (el bien amado por los melipillanos), me he convertido en un Melipillense... o sea, un ser que tiene sus raices en melipilla, pero que ha dejado su lugar de procedencia para venirse a vivir a Santiago por motivos de trabajo o estudio. El estar mas tiempo aqui, de cierto modo me ha servido para ordenarme, asumir responsabilidades y responder a estas, principalmente a la que me tiene aquí, la U, mejorando cada semestre mis notas, de la mano de un esfuerzo que va de por medio, pero que gracias al estar aquí y evitarme los viajes se ha vuelto algo mas manejable.

Si bien es cierto que la carrera de Diseño demanda un montón de tiempo para realizar trabajos que no paran de anotarse en los espacios de la agenda semanal, siempre queda un espacio para ese vital ocio... me refiero a ese llegar a tu casa, sacarte los zapatos, y en tardes como estas, quedarse a pata pelá, relajado en tu pieza, tomandote un juguito o un tazón con un buen café para descansar y pensar en que hicimos en el día, pero sin dejarse estar, porque en media hora mas tienes que estar manos a la obra para hacer otro encarguito o leerte algún paper cabezoncito.
Así se forma la rutina, llegando a tu casa esperando tener un tiempo contigo mismo, para luego dedicarte a trabajar nuevamente... y cuando terminas, te vas al sobre, o te quedas haciendo honor a tu hobbie o bien te das el lujo de ociociar para darte un espacio... lástima que bajo techo y entre 4 paredes. Y cuando llega el fin de semana, tienes que pensar en como repartir tu tiempo para terminar los encargos para lunes y martes, juntarte con tus compañeros, trabajar y llegada la noche... pues bueno... aqui es donde llega lo crítico, debido a que, antes solías compartir con tus amigos en esas noches de fin de semana comentando las tallas y pegas que tenias que hacer en la U, pero que ahora ya no están ahi, no por malos amigos, sino porque haz optado por tus estudios antes que tu mismo. y tus compañeros de clase, ya los haz visto demasiado, haz estado mas horas con ellos que con tu familia, lo cual no implica que te molesten, pero es muy sano darse el tiempo para respirar, en lo que ocupansu tiempo todos acudiendo con sus amigos de colegio o cercanos, algo normal que también solia hacer. Volvería a melipilla, pero mi manera de pensar ha decidido que el día que me vuelva un fin de semana, si te vas a pegar un pique a melipilla, que sea realmente para gozarlo a concho y no pensando en que al otro día tienes que hacer x cosa o volver corriendo a Santiago a seguir con los trabajos y demases.

En resumidas cuentas, Santiago se ha vuelto practicamente una ciudad de trabajo, donde vas a la batalla a tu U por la mayoría del tiempo, para luego volver a concentrarte en tu bunker y planificar las nuevas estrategias para el siguiente día y recibir la recompenza de tu esfuerzo, pasar cada ramo y marcarlo en tu revolver como uno menos en tu camino al profesionalismo.

Ahora, si bien el actual contexto que le asigno a esta ciudad es el de trabajo, porque no darle la oportunidad de que sea también mi hogar, o asignarle también un lado b, o sea, un contexto de recreación, algo que te de un poco de vida y te complemente, te deje respirar (smog) y te haga sentir totalmente a gusto, al encontrar el equilibrio entre tus deberes y tu desarrollo como persona.

En fin, la clave esta en que este dispuesto a abrirme espacio, dar cabida al relajo y el atreverme a socializar y conocer algo mas el entorno que me rodea... para así lograr, de una vez por todas, el sentirme parte de esta ciudad.

5 Comments:

Anonymous Anónimo said...

No sé tú... Pero lo que yo veo, es que "ese espacio" dentro de la ciudad, ya lo tienes ganado y encontrado hace un buen tiempo.

11:06 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

Wuau!!!!
Si tuvieramos tiempo o hacer una mesa redonda y comentar todas las experiencias que hemos tenido, desde el mitico VHS que tenemos hasta las fiestas tranquilas que hemos tenido en tu casa pelao, necesitariamos como 2 gigas de espacio jajajaja.
recuerdo que ibas a mi depto y te comias mi arroz y de ahi sus chelas y sus clasicas tiradas de objetos al publico desde el balcon....o las clasicas " Pelao te tengo una historia" jajajajaja o cuando era el chico UOL jajajaja.uhh muchas cosas y faltan muchas mas...la cosa es no perder la esencia.....total, todo lo que hemos hecho juntos como grupo es dificil que llegase a perder.

11:28 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

oh pero no lo tomes como un santiago entero trabajolico ;) los fines de semana realmente es otra cosa, especialmente el domingo, yo me recorro toda mi comuna en bici y en todas partes hay como (suena cursi) una "armonia" como que todas las personas andan relajadas y contentas jajaja hasta andar en micro es un deleite !! =) =) en serio hay que buscarle el lado bueno y no estresante de stgo ;) en el caso que no te escapes a melipilla jejeje ;) ;)

11:35 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

Wena Ro!!! Santiago es un lugar bonito si te das el tiempo de disfrutarlo, sus plazas, parques, costaneras y un monton de sitios interesantes. Puedes sociabilizar mas con tus compañeros en el ambito de los hobbies y asi con ellos y a traves de ellos conocer mas y mas gente (a mi me encanta eso), jajaja en una de esas como sabes si aparece alguien por ahi..., si es que ya no ha aparecido y sea eso lo que te haga comenzar a mirar a Santiago como algo mas que una ciudad para trabajar, pero bueno el tiempo lo dira...
Mas que nada aprovecha el tiempo de ocio para eso, relacionarte, conocer gente, lugares, estilos y un sin numero de cosas que te serviran en todo ambito.
Un abrazo grandote Ro y vente luego pa tomarnos unos vinitos!!! jajaaja.

11:44 p. m.

 
Anonymous Anónimo said...

Creo que es necesario mirarle el otro lado a esto de ser "melipillense" y tener que quedarse los fines de semana acá:
1-.Los horarios los fijas tú: Si bien depende mucho de la voluntad y la resposabilidad de cada uno, de vez en cuando uno se puede regalonear con horas extras de sueño el fin de semana sin que haya una madrugadora-madre pasando la aspiradora y un hermano con complejo de cantante de ducha. En mi caso, los ladridos de Tango, mi perro, son reemplazados por alarmas de autos, pero aunque parecería un mal parecido es mucho mejor un auto al que le puedes tirar huevos o tomates maduros a modo de venganza, que a tu propio can al que te da pena retar.
2-.El menú también es alección: Si sabes cocinar un poco, o tienes curiosidad culinaria -a menos que seas masoquista- no encontrarás desagradables sorpresas como (en lo que a mi respecta) jalea de pata de chancho, sopa de ingredientes desconocidos sobre los cuales es mejor no indagar, o simplemente encontrar platos vacíos con restos de tu comida preferida y darte cuenta de que alguien -anónimo siempre- se comió tu ración y que no queda más! grr!
3-. no tener que darle explicaciones a nadie: importante es que justo cuando llegas hecho bolsa a la casa, sin ganas de conversar con nadie, con evidente cara de mal genio, cansado, etc. nadie te haga la estúpida pregunta ¿te fue mal? o ¿estás cansado? o peor ¿cómo te fue hoy? (sobretodo si esa persona espera una respuesta cristiana! y sobretodo si ese alguien es padre o madre y no se los puede mandar a la cresta!)
4-.Invitar amigos a la casa sin dar explicaciones: Si hay que estudiar se estudia; si hay q webear, se webea y no hay una madre ofreciendo juguito, galletitas y preguntando a tus amigos por los papás, por la abuelita, por la Universidad , por el(la) pololo(a), etc.También se evitan los posteriores: "uy! que está cambiado ese niñito!", "a ese amigo no lo conocía, simpático, ¿qué hacen los papás?", o el terrible "ya pues, ahora tienes que ordenar, ¿opiensas dejar este chiquero?"
.......

... mmm bueno, creo que mi post se está robando un poco de protagonismo, después de todo se supone que acá debo comentar lo tuyo y no ponerme a elogiar santiasco...

Le sugiero -si me quiere hacer llorar- rememorar públicamente esos mágicos años colegiales de loros pelaos, catatos, pepitas de oros, angelitos de papel, etc.
Ya Ro, otro día sigo con los beneficios de ser una autoexiliada de melipilla por razones universitarias...ahora comenzó Sex and the City con muy buenas razones para quedarse en la ciudad y no en el campo...

Besos!

12:54 a. m.

 

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